TORRES GEMELAS

Solo en un lugar como aquel se podría disfrutar del silencio, la tranquilidad y la vista inmensa del azul incalculable e infinito del cielo de New York.
Solo un trabajo como aquel te permitía relacionarte con tu yo verdadero, flotando sobre cien pisos de concreto que te separaba del ruido matutino de una ciudad donde los idiomas se confunden y el silencio no es permitido.
Soñar con vivir en una ciudad como esta, es la razón por la cual muchos se aventuran creyendo conseguir esa gran oportunidad que tan solo unos pocos la logran.
Trabajar a cuatrocientos metros del suelo, no te permite pensar en los problemas políticos, sociales o religiosos de la humanidad.
Tan solo el ruido infernal de las turbinas de un gigante avión te pondrán de frente ante el mundo y en un abrir y cerrar de ojos te encontraras en el mismo infierno, donde la tolerancia y el amor por la humanidad se extinguen en la inmensidad de las llamas y el lamento de la voces.

Juan…EL LOCO